El síndrome de Burnout es un término utilizado para catalogar al exceso de cansancio físico y emocional. Esto ocurre cuando somos sometidos a largos períodos de estrés y actividades intensas sin descanso. Es conocido mayormente en el ámbito laboral, ya que se trabaja bajo una gran cantidad de presión.
El burnout o síndrome de agotamiento es una respuesta de nuestro organismo ante la saturación de actividades que involucran el esfuerzo físico, mental y emocional. Es por eso que lleva el nombre de ‘’burnout’’ que significa quemado o fundida en inglés. Dicha ´palabra que describe la sensación de ya no poder más.
Esto también se aplica en las mamás. La maternidad es el escenario en dónde el síndrome de Burnout o agotamiento es más propenso a desarrollarse. Y es que las madres se llevan la carga más pesada, ellas son los cimientos del hogar y de la vida de sus hijos.
Sabemos que las mamás tienen el trabajo más cansado de todos. Son multitareas y casi nunca poseen de tiempo para relajarse o concentrarse en ellas mismas.
Las madres siempre estan pendientes de todas las necesidades de sus hijos. Ellas cocinan el desayuno y la cena, van de compras, cuidan a su bebé si está enfermo así como también mantienen la limpieza del hogar.
Y si a esto le añadimos que es una mamá que también tiene un trabajo fuera de casa, los niveles de estrés son más elevados.
Además, las mamás tampoco descansan nisiquiera a la hora de ir a dormir. Ya que por más que se encuentren en la cama su mente sigue pensando en cómo estará su hijo y en todas las labores que tendrá que realizar cuando salga el sol.
El síndrome de Burnout es un trastorno que se va incubando silenciosamente y si no lo detectamos a tiempo puede tener una recupersión negativa en nuestras vidas.
Síntomas del síndrome de Burnout
Muchas veces solemos confundir al síndrome de Burnout o agotamiento con el hecho de que nos faltaron horas de sueño o simplemente con cansancio común.
Nuestro organismo es sabio y es por eso que manda alertas cuando algo no anda bien en nuestro cuerpo. Conoce los síntomas a continuación:
Síntomas físicos:
- Insomnio
- Problemas digestivos
- Falta de apetito
- Agotamiento extremo
- Sensación de fatiga
- Tensión en los músculos
- Úlceras gástricas
- Migrañas
- Obesidad
Síntomas emocionales:
- Irritabilidad
- Baja autoestima
- Nerviosismo
- Ansiedad
- Intolerancia a la frustración
- Pérdida de interes en tareas cotidianas
- Irresponsabilidad
- Depresión
- Despersonalización
- Desmotivación
¿Cómo combatirlo?
Este síndrome de agotamiento ocurre cuando nos esforzamos en exceso ya sea mental o físicamente. Para controlarlo debemos tomar las siguientes medidas:
No te exijas
Debemos aprender a establecer límites en nuestra vida como mamá. Divide las responsabilidades con tu esposo y hazle saber que también necesitas un tiempo para relajarte. No tratres de abarcar todas tus responsabilidades en un solo día.
Técnicas de relajación
La meditación o el yoga se convertirán en dos grandes aliados contra el Síndrome del Burnout. Practicar meditación y yoga te ayudarán a relajar la mente y la tensión muscular, así como también te reconectarás contigo misma.
Realiza algún deporte
La actividad física aumenta los niveles de endorfina en nuestro organismo. La endorfina es conocida como la hormona de la felicidad ya que al ser liberada nos sentimos más alegres y relajadas. Procura tener una rutina diaria de ejercicios, pueden ser aérobicos, baile o natación, elige el que mas te guste y empieza a practicarlos.
Pasa tiempo con amigos y/o familiares
Las cargas pesan menos cuando las compartes con alguna persona de confianza. Esto no significa que tus problemas desaparecerán pero nunca es bueno guardarse los sentimientos. Tomate un tiempo para salir con esas amigas a las que ya no ves o invita a ese familiar importante a tu casa.
Estilo de vida saludable
La alimentación saludable trae muchos beneficios a a la salud. Comer alimentos nutritivos te brindarán mas energía para realizar tus actividades. Disminuye las grasas y los ázucares en tus comidas. No te saltes los desayunos por ganar tiempo en el día. Come a tus horas y bebe dos litros de agua al día.
Ser madre es una de las experiencias más bonitas que podemos vivir, pero también una de las mas cansadas y agotadoras. No dejes tu salud en segundo plano y empieza a consentirte de vez en cuando.