Cosas que debes cambiar antes que sea tarde

Hoy te presentamos diez cosas que debes cambiar antes que sea tarde, es decir cuando seamos adultos mayores. Cuando somos jóvenes, solo pensamos en el momento que estamos viviendo. Nos dedicamos a vivir sin importar lo que pase más adelante, algunas veces no nos preocupamos por el futuro, lo que vendrá para nosotros, solo la pasamos bien.

El problema que vamos a tener es cuando seamos personas mayores, el arrepentimiento y la frustración invadirá nuestro ser. Por no haber hecho muchas cosas cuando éramos jóvenes, no haber aprovechado bien esa etapa y solo quedan los recuerdos.

Ahora ponte listo y no sigas en ese mismo circulo vicioso que estás viviendo. Es hora de que dejes estas cosas.

10 cosas que debes cambiar antes que sea muy tarde:

1. No esforzarte en la escuela

Como estudiantes debemos de esforzarnos en la escuela, porque es algo importante para nosotros, es por nuestro futuro. Así que, aunque tus padres te exijan que estudies, tú tienes que hacerlo por tu propio motivo.

Si no vas a la escuela por irte a otro lado, no creas que estas engañando a tus padres, te estas engañando a ti mismo. Aprovecha que tienes la posibilidad de estudiar, tus padres se esfuerzan por darte una buena educación, hay muchos otros niños que no estudian y de eso te puedes arrepentir en el futuro.

“Un hombre sin estudios es un ser incompleto”
(Simón Bolívar)

 

2. Tener un trabajo que odies

De que nos sirve tener un trabajo donde la paga sea muy buena, pero que no nos sintamos a gusto con ese trabajo. Tener un trabajo que odiamos es algo que nos desgasta poco a poco la vida, es un estrés constante.

Si estas en busca de un trabajo, trata de encontrar algo acorde a ti, a lo que te guste. Si eres feliz haciendo lo que te gusta estas por un buen camino, pero si al contrario no te sientes contento, deberías plantearte cambiar de trabajo.

“Escoge un trabajo que te guste, y nunca tendrás que trabajar ni un solo día de tu vida”
(Confucio)

3. Haberte callado lo que pensabas y sentías

No decir lo que pensabas también te hace daño. Si te quedas callado ante algo que para ti no está bien o no es justo, a la larga no te dejara tranquilo ese sentimiento de poder haber ayudado a alguien y no lo hiciste. Así que no te quedes callado y da tus opiniones sin ofender a nadie, ni hacer mal a nadie.

“Quien reprime sus sentimientos enfermará por amor o por odio”
(Eduardo Alighieri)

4. Quieres agradar a todos

Ese es un mal hábito de muchas personas, piensan que por agradar a todo el mundo van a ser aceptados o bien visto, pero no es así. Tú como persona autentica que eres no repitas lo mismo que ves en otras personas. No siempre les caeremos bien a todo el mundo o haremos lo que ellos quieran. Si haces algo hazlo por ti, por tu propio bien, no para agradar a alguien.

“Querer agradar a los demás es una trampa peligrosa”
(Epicteto)

5. No aprender un nuevo idioma

Siempre es bueno enriquecer nuestro vocabulario, aprender nuevos idiomas. Nuestro cerebro necesita nutrirse de conocimientos y que mejor alimento seria aprender un nuevo idioma. A veces las personas se ponen obstáculos cuando van a viajar a otro lugar.

Y cuando son mayores se quejan diciendo que si hubiera aprendido tal idioma estuviese trabajando en tal país. Así que si eres joven es hora de que te pongas a estudiar un nuevo idioma, si no tienes las posibilidades de ir a un instituto, aprovecha los beneficios que nos da el internet.

En YouTube encontraras muchos tutoriales para aprender idiomas, desde el nivel básico hasta el avanzando. Así que no pongas excusas para aprender.

“Los analfabetos del siglo XXI no serán aquellos que no sepan leer y escribir, sino aquellos que no puedan aprender, desaprender y reaprender”
(Alvin Toffler)

6. No haber viajado

Viajar es una de las experiencias más maravillosas que te da la vida, conocer lugares que no conocías, ver culturas diferentes a la tuya, es una experiencia que siempre lo recordarás hasta que seas mayor. Vive ahora, trata de viajar lo más que puedas, o el tiempo que tengas.

Las personas necesitamos un tiempo para desestresarnos y viajar es una buena inversión.

“El mundo es un libro y quienes no viajan leen solo una página”
(San Agustín de Hipona)

7. No haber charlado con tus padres

Cuando somos jóvenes o estamos entrando a la adolescencia, vemos a nuestros padres como seres autoritarios, que quieren cumplir su voluntad, ante todo. Y pensamos que no nos entienden, pero no piensen así.

Si los padres son como son, es porque piensan en nuestro bienestar. Como jóvenes tenemos muchas dudas e inquietudes y que mejores amigos podemos encontrar que nuestros padres.

Aprovechen que tienen a sus padres al lado y conversen con ellos. Ellos se sentirían felices de que sus hijos les tengan esa confianza para contarle sus problemas. El día que le falte un padre o una madre será muy tarde para ustedes y el arrepentimiento de no haber hablado con ellos no valdrá nada.

“Lo único que he lamentado desde que llegaste a mi vida fue no haberte disfrutado mucho tiempo antes”

8. Tener miedo a todo

Es normal que sintamos miedo, pero no esperes que el miedo te invada. Por tener miedo vas a perder muchas cosas, del cual te arrepentirás cuando seas mayor. Atrévete a vencer tus miedos, si algo no te salió bien, eres un luchador, porque vences el miedo a la derrota.

En la vida hay que arriesgar para ganar algo, así que deja esos miedos atrás y sigue para adelante. Recuerda que de esos errores aprenderás.

“No tengas miedo de los cambios lentos, solo ten miedo de permanecer inmóvil”
(Proverbio chino)

9. No vivir tus sueños

Como seres humanos tenemos sueños, y esos sueños sirven de motivación para esforzarnos por conseguirlo. Si piensas que no vas a poder cumplir tus sueños no llegarás a ningún lado. Sueña a lo grande y lucha por esos sueños, no dejes que el fracaso opaque esos sueños.

“El futuro pertenece a aquellos que creen en la belleza de sus sueños”
(Eleanor Roosevelt)

10. Guardar rencor a un ser querido

Tener rencor no hace bien a nuestro corazón. No seremos felices completamente por ese sentimiento que tenemos hacia ese ser querido. Olvida esos rencores para bien de tu salud, vivir en un estado de odio y rencor acaba nuestra vida y de eso estaremos lamentándonos cuando seamos mayores.

“No dejes que se muera el sol sin que hayan muerto tus rencores”
(Mahatma Ghandi)